Cómo aumentar la libido

¿Qué es la libido?

La libido es el deseo de placer sexual que tiene una persona, tanto hombres como mujeres. Puede que haya épocas en las que disminuya nuestra libido temporalmente –por estrés, ansiedad o depresión, entre otras-, pero esta no debería ser la norma; también es importante tener en cuenta que varía en gran medida entre individuos y que no se mantiene constante en todas las etapas de la vida, sobre todo en mujeres. 

Se entiende que el deseo sexual va a estar influenciado por el estado de ánimo, la situación en la que encontramos, estilo de vida y, por supuesto, por la atracción física hacia la otra persona. Pero, realmente, ¿qué mecanismos fisiológicos hacen aumentar o disminuir la libido? 

Brevemente os explicaré que las hormonas juegan un papel esencial en la libido, puesto que dependiendo del nivel de estrógenos/testosterona que tengamos, vamos a estar más predispuestos a sentir más o menos deseo sexual. Las mujeres somos más hormono dependientes debido a que la llegada y retirada de la menstruación marcará un antes y un después en lo que relaciona a los niveles de estrógenos. Una vez entramos en la menopausia, hay una decaída importante de estrógenos y, junto con ellos, una caída importante de la libido. Los hombres, de manera normal, no van a tener estos picos hormonales tan grandes y van a ser más regulares a lo largo de su vida. 

Como ya he mencionado un poco más arriba, el estilo de vida también será un factor clave para aumentar el apetito sexual y regular, a la vez, el equilibrio hormonal. Cabe destacar que la fertilidad en ambos sexos también viene dada según el estilo de vida que llevemos; eso es, hábitos alimentarios, salud mental y emocional, equilibrio hormonal y ejercicio físico. 

Como podéis ver, la salud sexual y la libido son un cóctel que combinan distintos factores pero que, erróneamente, solemos atribuir a uno solo: la atracción física.  

Qué sabemos de las hormonas y el deseo sexual 

El principal factor que diferencia a los hombres de las mujeres está en las hormonas: alto nivel de testosterona en los hombres y alto nivel de estrógenos en las mujeres. Estas hormonas son las que regulan la formación de los órganos sexuales, el tono de la voz, el vello, los pechos en las mujeres, la acumulación de grasa, etc. 

Se ha visto en múltiples estudios que el nivel medio de testosterona en los hombres se ha reducido significativamente en las últimas décadas. Es un hecho y no se trata solamente de un problema estético -más acumulación de grasa en el abdomen, en los pechos, cambio de voz-, sino que también está ligado a problemas de salud mental y física como la depresión, pérdida de músculo o falta de deseo sexual. 

  • La disminución de testosterona en el hombre disminuye la apetencia sexual 
  • Los andrógenos influyen en el deseo de las mujeres. En los hombres manifiestan deseo sexual disminuido y disfunción eréctil. 
  • Los estrógenos en las mujeres actúan de forma directa en la libido; si éstos se encuentran bajos el deseo también.  
  • La elevación de prolactina durante el embarazo de una mujer -también puede estar elevada en hombres- disminuye la libido en ambos sexos. 

Enemigos de la libido 

  • Alcohol: consumir alcohol de forma constante y crónica va a favorecen un estado oxidativo e inflamatorio que alterará, en mayor o menor medida, la producción de óvulos y espermatozoides, en mujeres y hombres respectivamente. En los hombres, especialmente, perjudica a los espermatozoides y afecta a la secreción hormonal, actuando directamente en los testículos y haciendo disminuir los niveles de testosterona a la vez que aumentan los estrógenos. Como consecuencia, el impulso sexual se reduce y la espermatogénesis -producción de espermatozoides- también.  
  • Grasa abdominal: la aromatasa es una enzima que convierte las hormonas masculinas en estrógenos y se encuentra principalmente en las células grasas. Así pues, a más exceso de grasa más actividad de la aromatasa y, consecuentemente, más cantidad de estrógenos. Es un círculo vicioso en el que la aromatasa genera estrógenos debido a un acúmulo excesivo de grasa y éstos estrógenos potenciarán aún más el aumento de peso.  
  • Estrés: el estrés activa una respuesta de supervivencia en el cuerpo –por razones ancestrales obvias- y “apaga” las que no son esenciales, y para tu cerebro estresado, el sexo definitivamente no es esencial. El estrés va a liberal cortisol en la glándula suprarrenal y esta sustancia altera los niveles de testosterona. 

Nutrición y libido 

La demonización de la grasa y su eliminación de algunas dietas que están tan de moda hoy en día, debemos saber que perjudica de forma directa en nuestra salud sexual, ya que la mayoría de hormonas, incluidas estrógenos y testosterona, se sintetizan a partir de grasa. ¡Necesitamos grasas saludables! Aguacate, frutos secos, pescado azul, semillas, aceite de oliva virgen y coco son algunas opciones. No las confundas con grasas saturadas o grasas trans, las que provienen de productos procesados no nos interesan en absoluto; éstas pueden ser las margarinas, aceite de girasol, pizzas, frituras y demás. 

Los alimentos de alto índice glucémico, una dieta demasiado rica en carbohidratos y la ingesta elevada de proteína animal perjudican la fertilidad. Estos hábitos alimentarios no nos van a generar salud, así que procura retirar cualquier harina refinada, procesado o derivado cárnico de tu dieta habitual. 

Nutrición y libido
Nutrición y libido

Respecto a los micronutrientes, el selenio, la vitamina A, D, C, E y las del grupo B, calcio, zinc, magnesio y ácido fólico van a tener un impacto positivo en el aumento de la libido. Los ácidos grasos esenciales omega-3 y omega-6 mencionados anteriormente también se incluyen, aquí te explico todo acerca de las grasas saludables.

Algunos de los alimentos que nos van a ayudar a disminuir la actividad de la aromatasa son: regaliz, champiñones, lino, sésamo, canela, té verde, cítricos, frutos del bosque, apio, espárragos, pistachos, avellanas y verduras crucíferas.  

Complementos alimentarios 

En cuanto a los suplementos dietéticos podemos encontrar algunos que ayudan a aumentar la libido debido a que éstos aportan todos los nutrientes necesarios para conseguir una buena salud sexual. Hoy en día aun no hay demasiada evidencia científica en humanos, por lo que la primera opción siempre será cambiar el estilo de vida.

suplementació y salud sexual
Suplementación y libido
  • Tribulus: algunos estudios han demostrada que esta planta ayuda a aumentar la cantidad de espermatozoides, incrementa la libido y actúa como reforzador de la testosterona y ayuda a aumentar la masa muscular, por lo que se suele utilizador en el ámbito deportivo. 
  • Maca: es una raíz andina que potencia el impulso masculino y femenino. Es rica en L-arginina, calcio, zinc, vitamina E y C y vitaminas del grupo B. Gran reguladora hormonal, favorece la fertilidad y la libido y ayuda a regular el ciclo menstrual, entre muchas otras funciones. 
  • Ginseng coreano: además de ser un energizante excelente, se ha visto que actúa de forma similar a la viagra, ya que anula los efectos del estrés, relaja y tonifica el organismo. 
  • Corteza de Catuaba: contiene una serie de fitoquímicos que son responsables de su efecto estimulante y tonificante, con una larga tradición de usarse como afrodisíaco, especialmente para favorecer la erección, y también por sus beneficios sobre la memoria y el sistema nervioso.
  • Fenogreco: es una planta que ha demostrado resultados significativos en cuanto a la elevación de testosterona, aunque la vía responsable de dicho efecto aún no es evidente.

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